martes, 10 de abril de 2012

No hay segunda oportunidad para causar una buena primera impresión


Es así, ayer llegamos Maritere y yo a casa, MI casa, se esperaba peor el piso, dimos un paseo largo largo largo y vio mi pequeña ciudad, perfectamente abarcable a pie, Estafeta, Ayuntamiento, los corralillos, la Plaza del castillo, Carlos III y terminamos el paseo en el Ducal, el primer sitio que conocimos al llegar a Pamplona, tienen unas croquetas que además de riquísimas son enormes, mmmmmmm CRRROQUETAS.
Hoy me he levantado, con ganas en silencio para no despertar a mi Tati, me he duchado, he desayunado y he fregado los cacharros, llovía, y he marchado a trabajar, solo 15 minutos de casa, andando, ¡qué gozada! Después de una mañana rara, de las de comenzar en una oficina, me he venido a casa, corriendo, porque volvía a llover, porque quería descansar y tenía ganas de comer. Llego y la veo con la comida hecha la mesa puesta y sonriendo, que bien, que alegría, cuanto apoyo. He comido genial y en buena compañía, ahora descansamos ambas. Ya le he hecho un plano de cómo ir a la oficina a por mí, a ver si sabe llegar, esperemos que sí.
De momento todo genial, non ti preocupare. J
LOVE!

No hay comentarios:

Publicar un comentario